Amiga mejor darte cuenta, más temprano que tarde si de hechor eres la elección de otra persona o simplemente una opción. Aceptar vivir de las migajas es morir de hambre por amor.
¿Sabes cuándo vas a asar una comida que te gusta? En este caso, la analogía utilizada la de las opciones que te presenta un mozo en un restaurant.
Llegas,y el camarero comienza a describir el menú y pregunta si que eliges.
En silencio, escuchas y aceptas algunas opciones que te presenta como elegir la entrada, el plata de fondo y con que bebida acompañaras el banquete … el proceso es claro, recibes opciones y aceptas.
Bueno, esta analogía debe reflejarse en los tiempos de las relaciones líquidas. ¿Eres más una “opción” o la “elección” de alguien?
Aviso, presta atención! ¿Alguna vez te has detenido a pensar que podrías ser la “opción” en la vida de la persona que “elegiste”? Dos objetivos distintos condenados al desajuste.