La vida en pareja está llena de momentos que permiten construirla cada día con mayor solidez, hay muchos detalles y manifestaciones del amor que ayudan a que tu relación sea cada vez mejor. Aunque no podemos esperar sentir mariposas en el estómago todo el tiempo, toda la vida, sí podemos realizar muchas cosas que harán de nuestro amor algo único y especial. Una relación de pareja debería ser un lugar al que acudir cuando necesitamos paz, tranquilidad y compañía, es algo que llena tu vida con lo que siempre deseaste, es sentirte realizado y seguro, es saber que, si llegan a discutir, sabrán cómo reconciliarse.Es importante comprender que una relación satisfactoria y duradera no sucede al azar, sino que hay que llenarla de momentos que le den solidez y estructura. A continuación, exponemos los siete secretos para un amor duradero:
1. Busca siempre el segundo lugar. El egoísmo no funciona en el matrimonio. La mayoría de las parejas son más egoístas entre sí que con sus amigos, se preocupan por los éxitos de los demás, buscan áreas de interés común y ceden para no romper la amistad. No sucede lo mismo en la relación de pareja. Las mejores relaciones son aquellas que se rigen por el principio de dar en lugar de recibir, donde se colocan las necesidades del otro primero que las propias. Si pones en práctica este principio, es probable que la otra persona responda de la misma manera con amor, cariño y entrega.
2. Sé generoso con tus halagos. Por lo menos una vez al día, busca algo positivo que decirle a tu pareja. Siempre hay algo puro, noble y digno de ser alabado. Pon atención y piensa en algo positivo que tu pareja haya hecho ese día. Para asegurar un amor duradero, debes ser el ‘fan’ número uno de tu pareja. El famoso psicólogo John Gottman, estudió a 2.000 matrimonios, afirma que, por cada comentario o acción negativa se precisan al menos cinco positivas que las puedan contrarrestar, para que el amor de la pareja se mantenga fresco.
3. Permanecer unidos en tiempos de crisis. Nada los mantendrá más unidos que mantenerse juntos en los momentos complicados de la vida. Paul Pearsall, autor de ‘Laws of lasting love’ (Las leyes del amor duradero), describe cómo la compañía de su esposa durante el tiempo en que enfrentó el cáncer, le ayudó a superar los pronósticos médicos. Él relata cómo su mujer lo llevó de la mano de un doctor a otro hasta encontrar al adecuado, eran uno mismo, se movían juntos todo el tiempo. Otro caso conocido es el del actor Christopher Reeves, quien interpretaba a ‘Superman’ y quedó parapléjico por la caída de un caballo. Su esposa escribió un libro narrando cómo a partir de ese momento su matrimonio alcanzó la plenitud. La fortaleza de esta mujer y su apoyo incondicional sostienen la voluntad de su marido por seguir viviendo. Ambos han sido capaces de encontrar la felicidad permaneciendo unidos ante las dificultades más terribles.
4. Pasar mucho tiempo juntos. A veces se cree que las parejas más felices tienen actividades por separado. Es verdad que necesitamos ser personas independientes y tener personalidad propia, pero la vida en pareja requiere mantenimiento. La psicóloga Catherine Johnson entrevistó matrimonios que llevan casados entre 7 y 55 años; más de la mitad de los cuales describieron su matrimonio como ‘muy feliz’. Ella se dio cuenta de que una característica común de esas parejas era que pasaban bastante tiempo juntos, a pesar de no tener los mismos gustos e intereses. La idea no es mantener ‘identidades separadas’, sino poder descubrir una ‘identidad compartida’.
5. Creer siempre lo mejor de la otra persona. Muchas parejas dejan de sentir alegría, esperanza y amor por su relación, porque han olvidado todo lo positivo de su pareja y se enfocan solo en lo negativo. Esta actitud tiene terribles consecuencias pues hacen que cualquier experiencia sea negativa y dolorosa, aun cuando no lo sea. Es necesario mantener una actitud positva frente a las cualidades de tu pareja, siempre y cuando no sea irresponsable, agresiva o hiriente con los demás. En vez de pensar que tu esposa es ‘chismosa’, piensa que es sociable y expresiva; en lugar de creer que tu esposo es ‘serio y aburrido’, considera que siempre da a las cosas el lugar y la importancia que merecen, evitando malos entendidos y discusiones sin sentido. En lugar de decir que tu esposa es ‘demasiado débil’, aprende a valorar su carácter amable, comprensivo y de apoyo hacia los demás. En lugar de calificar a tu esposo como ‘demasiado estricto’, podrías pensarlo como una persona disciplinada, reflexiva y madura.
6. Expresa tu amor creativamente y de manera frecuente. Dejarle notas en su desayuno, mandarle mensajes, esconderle un chocolate en su portafolio, etc., son detalles simples que harán que tu pareja te recuerde todo el día y te vea como alguien a quien realmente le importa tu bienestar. Piensa de qué manera puedes sorprender a tu pareja durante su día de trabajo, durante un viaje de negocios, para que le recuerdes que es la persona favorita de tu vida.
7. Has de tu matrimonio una prioridad. Si bien es cierto que la pareja no es la única relación significativa que tenemos, si debes ser la más importante, pues es con quien compartes tu proyecto de vida, tus finanzas, tus sueños. Sin dejar de lado la relación con tus padres, tus hermanos y tus amigos, mantener en la cima la relación de pareja hará que tu amor dure toda la vida.
Existen muchos consejos y recomendaciones a considerar para mantener el amor, cosas que nos han dicho nuestras abuelas, nuestras madres, lecciones que hemos visto en la tele o escuchado en el radio, algunas como: no estar enfadados los dos al mismo tiempo; no gritar jamás, a menos que la casa se esté incendiando; si alguno de los debe ganar una discusión, permite que sea el otro; si tienes algo que criticar, hazlo delicadamente; nunca traigas al presente, problemas del pasado; cuando cometas errores, admítelos y pide perdón. Si la otra persona es quien se ha equivocado, aprende a perdonarlo. Lo más importante es el respeto, la confianza y la comunicación. Saber que si están juntos es porque ambos lo deciden y están dispuestos a comprometerse con el otro para ser felices juntos.
