10 señales que te dirán ‘a él no le gustarías tanto’; aléjate lo más pronto posible

Si estás intentando averiguar que tanto le gustas o si de plano no siente nada por ti, incluso aunque haya habido algo entre ustedes, necesitas abrir más los ojos y cerrar las orejas, esto es, poner menos atención en lo que dice y estar más atenta a lo que hace. Las palabras importan mucho, pero los hechos hablan por sí solos y muchas veces nosotras mismas hemos dicho cosas que en realidad no sentimos ni queremos, solo por quedar bien con los demás o por no causar daño a otro.

Muchas películas nos han hablado de este tema, a veces hemos aplicado algunas cosas y otras no, pero hemos aprendido y tal vez incorporado algo de lo que vemos en la pantalla. Una de esas películas es la comedia romántica llamada “A él no le gustas tanto”, donde a una niña le hacen creer que los hombres son groseros con las mujeres cuando las quieren, por más incoherente que esto suene.

Esto no tiene sentido ni en el cine ni en la vida real, aunque es probable que hayas crecido escuchando frases como ‘los hombres son fríos cuando te quieren’, ‘los hombres molestan a las mujeres que les gustan’, ‘los hombres son insensibles’, etc. Estas ideas, además de ser completamente fuera de la época que vivimos, pueden resultar contraproducentes para una chica que tiene intenciones de conquistar a un hombre y mantener una buena relación con él.

Lo mejor es que conozcas las señales que sí indican que él no quiere nada contigo y que solo te lastiman; contrario a lo que te dijeron, nada de esto cambiará, mientras tú no te alejes de él.

1- Se hace la víctima en las peleas. Si en más de una ocasión ha buscado ganar las discusiones haciéndose la víctima, es poco probable que le importen tus sentimientos.

2- Nunca tiene tiempo para ti. Cuando te habla, haces espacio en tu agenda, pero a él siempre le surgen situaciones y compromisos urgentes y difícilmente cumple cuando la idea de verse y pasar un rato juntos ha sido tu iniciativa.
3- A veces sientes que te vistes para él y no para ti. Dejaste de usar la ropa que te gusta y que refleja tu verdadera personalidad, porque él te dijo lo que lo que a él le gusta sí se te veía bien. En el fondo sientes que estás fingiendo sentirte cómoda y sabes que has dejado de ser tu misma.


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